8.7.04
El jefe de los Tedax contradice a Acebes y afirma que nunca informó del hallazgo de Titadine
8-07-04
11-M LA INVESTIGACION / Manzano mantiene que todo se debió a una confusión en la «cadena de mando» de la policía / El ex ministro del Interior se refirió a la utilización en el atentado de un explosivo habitual de ETA
El jefe de los Tedax contradice a Acebes y afirma que nunca informó del hallazgo de Titadine
MANUEL CERDAN
J. J. SANCHEZ MANZANO
Comisario jefe de los Tedax, la unidad de desactivación de explosivos.
La unidad pertenece a la Comisaría General de Seguridad Ciudadana.
Participó personalmente en la desactivación de la mochila bomba.
Confirmado como jefe de los Tedax por el nuevo equipo socialista.
MARIANO RAYON
Comisario jefe de la Unidad Central de Información Exterior (UCIE).
Tiene a su cargo a 70 agentes especializados en terrorismo islamista.
Se hizo cargo de la investigación a partir de la mañana del 13 de marzo.
Fue coordinador del grupo europeo de terrorismo.
MADRID.- La Comisión de Investigación del 11-M sigue por el camino de las contradicciones. Si durante el primer día éstas surgieron de los testimonios de un portero y un comisario, las de ayer poseen otro nivel, porque nacen de la propia estructura del Ministerio del Interior. El comisario Juan Jesús Sánchez Manzano, jefe de la Unidad de Desactivación de Explosivos Tedax, rectificó al ex ministro del Interior Angel Acebes sobre las primeras informaciones acerca del explosivo utilizado en los atentados terroristas.(.../...)
Acebes anunció la misma mañana del 11-M, sobre las 13.30 horas, que los restos de los explosivos hallados en los trenes conducían a ETA porque eran de la marca que utilizaba habitualmente la banda terrorista, según le habían comunicado los expertos policiales.El ministro no precisó la marca de esa dinamita, pero se refería a Titadine, como recogió en un teletipo la agencia Efe poco después.
Sin embargo, ayer el jefe de los Tedax afirmó ante la Comisión que su unidad en ningún momento facilitó ese dato porque lo desconocía: «Los restos de los explosivos llegaron a la unidad a las 12.30 horas y los primeros resultados se obtuvieron a las 14.00 horas.A partir de ese momento sabíamos que era dinamita, porque habían aparecido restos de nitroglicerina, pero sin poder precisar la clase, ya que hay diferentes tipos de dinamitas. No se supo que era Goma 2 hasta la madrugada del 12 de marzo».
Sánchez Manzano contradecía así la primera versión oficial del Ministerio del Interior. Según manifestó el jefe de los Tedax a los miembros de la Comisión, todo pudo ser fruto de un error de alguno de sus superiores: «Es posible que por encima de mí, en la cadena de mando, cuando dijimos dinamita alguien lo asociara con Titadine».
En el documento 11-M: toda la verdad en tiempo real, elaborado por el anterior Gobierno y que obra en poder de la Comisión, se recoge la siguiente información sobre la cronología de los hechos del 11-M: «12.00 horas. Reunión en la Secretaría de Estado de Seguridad con los responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado... Indicios de que la dinamita del explosivo es la habitual de ETA».
Los datos fueron facilitados en la reunión por el entonces subdirector operativo de la policía, Pedro Díaz-Pintado, que hoy comparece ante la Comisión. La información se la había proporcionado en una conversación telefónica el comisario general de Seguridad Ciudadana, Santiago Cuadro. Este, previamente, había recabado los datos del propio Tedax, el departamento de desactivación de explosivos que pertenece a ese área policial. Al parecer, uno de los responsables de los Tedax le confirmó que el explosivo era Titadine. De ahí que Díaz-Pintado se refiriera a Titadine «con cordón detonante».
Sánchez Manzano, a preguntas del diputado de IU Gaspar Llamazares, insistió en cambio en que informó verbalmente de los primeros resultados al comisario general de Seguridad Ciudadana a las 14.30 horas: «Le digo que es dinamita y redacto una nota que le entrego al día siguiente».
Sánchez Manzano señaló que ETA, desde finales de 1999, sólo utiliza en sus atentados Titadine, que robó en Francia, pero matizó: «El hecho de que no fuera Titadine no excluía a ETA. Los policías no podemos excluir ninguna hipótesis en nuestras líneas de investigación hasta no manejar todos los datos».
El jefe de los Tedax rebatió el testimonio de Luis Garrudo, el portero de Alcalá de Henares que localizó la furgoneta de los terroristas. Insistió en que la cinta, los detonadores y los restos de explosivos fueron hallados en la inspección que se llevó a cabo en las instalaciones de los Tedax en Canillas, en contra de la versión del portero, que afirmaba que habían sido encontrados en Alcalá de Henares.
El testimonio de Mariano Rayón, comisario jefe de la Unidad Central de Información Exterior (UCIE), sirvió para refrendar que ese grupo policial, especializado en terrorismo islamista, participó en las pesquisas desde el primer momento, aunque oficialmente se hizo cargo de la investigación a las 11.30 horas del sábado 13 de marzo, después de las primeras detenciones y de la localización del locutorio de Lavapiés.
Los agentes de la UCIE entraron en escena el propio 11-M, tras la aparición en la furgoneta de la cinta con versos coránicos y la reivindicación de la masacre por las Brigadas de Abu Hafs el Masri, a través de un correo electrónico remitido al diario árabe con sede en Londres Al Quds Al Arabi.
Según Mariano Rayón, él mismo realizó las comprobaciones con colegas de servicios policiales extranjeros y éstos le dijeron que la «fiabilidad» de la reivindicación no era absoluta. Se trataba del mismo grupo que había reivindicado el apagón de Estados Unidos, que más tarde resultó ser un fallo técnico.
El comisario aclaró que la pista definitiva que condujo a la célula de Lavapiés surgió a raíz del estudio de la tarjeta prepago encontrada en el teléfono de la mochila bomba en la madrugada del 12 de marzo.
Todos los portavoces de la Comisión preguntaron a Rayón por el contenido de un documento, elaborado por el comisario el 28 de noviembre de 2003, en el que avisaba de la amenaza del terrorismo islamista a raíz de la intervención de España en Afganistán e Irak. «Al Qaeda había situado a España como objetivo en octubre de 2003. Y, como se ha visto en otros países, Al Qaeda siempre cumple sus amenazas», sentenció.
El comisario de la UCIE rechazó que el atentado del 11-M se debiera a un fallo en la prevención policial porque, según él, su unidad ha desarrollado 17 operaciones contra grupos terroristas islamistas con más de 150 detenciones en los últimos dos años.
El jefe de los Tedax contradice a Acebes y afirma que nunca informó del hallazgo de Titadine
MANUEL CERDAN
J. J. SANCHEZ MANZANO
Comisario jefe de los Tedax, la unidad de desactivación de explosivos.
La unidad pertenece a la Comisaría General de Seguridad Ciudadana.
Participó personalmente en la desactivación de la mochila bomba.
Confirmado como jefe de los Tedax por el nuevo equipo socialista.
MARIANO RAYON
Comisario jefe de la Unidad Central de Información Exterior (UCIE).
Tiene a su cargo a 70 agentes especializados en terrorismo islamista.
Se hizo cargo de la investigación a partir de la mañana del 13 de marzo.
Fue coordinador del grupo europeo de terrorismo.
MADRID.- La Comisión de Investigación del 11-M sigue por el camino de las contradicciones. Si durante el primer día éstas surgieron de los testimonios de un portero y un comisario, las de ayer poseen otro nivel, porque nacen de la propia estructura del Ministerio del Interior. El comisario Juan Jesús Sánchez Manzano, jefe de la Unidad de Desactivación de Explosivos Tedax, rectificó al ex ministro del Interior Angel Acebes sobre las primeras informaciones acerca del explosivo utilizado en los atentados terroristas.(.../...)
Acebes anunció la misma mañana del 11-M, sobre las 13.30 horas, que los restos de los explosivos hallados en los trenes conducían a ETA porque eran de la marca que utilizaba habitualmente la banda terrorista, según le habían comunicado los expertos policiales.El ministro no precisó la marca de esa dinamita, pero se refería a Titadine, como recogió en un teletipo la agencia Efe poco después.
Sin embargo, ayer el jefe de los Tedax afirmó ante la Comisión que su unidad en ningún momento facilitó ese dato porque lo desconocía: «Los restos de los explosivos llegaron a la unidad a las 12.30 horas y los primeros resultados se obtuvieron a las 14.00 horas.A partir de ese momento sabíamos que era dinamita, porque habían aparecido restos de nitroglicerina, pero sin poder precisar la clase, ya que hay diferentes tipos de dinamitas. No se supo que era Goma 2 hasta la madrugada del 12 de marzo».
Sánchez Manzano contradecía así la primera versión oficial del Ministerio del Interior. Según manifestó el jefe de los Tedax a los miembros de la Comisión, todo pudo ser fruto de un error de alguno de sus superiores: «Es posible que por encima de mí, en la cadena de mando, cuando dijimos dinamita alguien lo asociara con Titadine».
En el documento 11-M: toda la verdad en tiempo real, elaborado por el anterior Gobierno y que obra en poder de la Comisión, se recoge la siguiente información sobre la cronología de los hechos del 11-M: «12.00 horas. Reunión en la Secretaría de Estado de Seguridad con los responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado... Indicios de que la dinamita del explosivo es la habitual de ETA».
Los datos fueron facilitados en la reunión por el entonces subdirector operativo de la policía, Pedro Díaz-Pintado, que hoy comparece ante la Comisión. La información se la había proporcionado en una conversación telefónica el comisario general de Seguridad Ciudadana, Santiago Cuadro. Este, previamente, había recabado los datos del propio Tedax, el departamento de desactivación de explosivos que pertenece a ese área policial. Al parecer, uno de los responsables de los Tedax le confirmó que el explosivo era Titadine. De ahí que Díaz-Pintado se refiriera a Titadine «con cordón detonante».
Sánchez Manzano, a preguntas del diputado de IU Gaspar Llamazares, insistió en cambio en que informó verbalmente de los primeros resultados al comisario general de Seguridad Ciudadana a las 14.30 horas: «Le digo que es dinamita y redacto una nota que le entrego al día siguiente».
Sánchez Manzano señaló que ETA, desde finales de 1999, sólo utiliza en sus atentados Titadine, que robó en Francia, pero matizó: «El hecho de que no fuera Titadine no excluía a ETA. Los policías no podemos excluir ninguna hipótesis en nuestras líneas de investigación hasta no manejar todos los datos».
El jefe de los Tedax rebatió el testimonio de Luis Garrudo, el portero de Alcalá de Henares que localizó la furgoneta de los terroristas. Insistió en que la cinta, los detonadores y los restos de explosivos fueron hallados en la inspección que se llevó a cabo en las instalaciones de los Tedax en Canillas, en contra de la versión del portero, que afirmaba que habían sido encontrados en Alcalá de Henares.
El testimonio de Mariano Rayón, comisario jefe de la Unidad Central de Información Exterior (UCIE), sirvió para refrendar que ese grupo policial, especializado en terrorismo islamista, participó en las pesquisas desde el primer momento, aunque oficialmente se hizo cargo de la investigación a las 11.30 horas del sábado 13 de marzo, después de las primeras detenciones y de la localización del locutorio de Lavapiés.
Los agentes de la UCIE entraron en escena el propio 11-M, tras la aparición en la furgoneta de la cinta con versos coránicos y la reivindicación de la masacre por las Brigadas de Abu Hafs el Masri, a través de un correo electrónico remitido al diario árabe con sede en Londres Al Quds Al Arabi.
Según Mariano Rayón, él mismo realizó las comprobaciones con colegas de servicios policiales extranjeros y éstos le dijeron que la «fiabilidad» de la reivindicación no era absoluta. Se trataba del mismo grupo que había reivindicado el apagón de Estados Unidos, que más tarde resultó ser un fallo técnico.
El comisario aclaró que la pista definitiva que condujo a la célula de Lavapiés surgió a raíz del estudio de la tarjeta prepago encontrada en el teléfono de la mochila bomba en la madrugada del 12 de marzo.
Todos los portavoces de la Comisión preguntaron a Rayón por el contenido de un documento, elaborado por el comisario el 28 de noviembre de 2003, en el que avisaba de la amenaza del terrorismo islamista a raíz de la intervención de España en Afganistán e Irak. «Al Qaeda había situado a España como objetivo en octubre de 2003. Y, como se ha visto en otros países, Al Qaeda siempre cumple sus amenazas», sentenció.
El comisario de la UCIE rechazó que el atentado del 11-M se debiera a un fallo en la prevención policial porque, según él, su unidad ha desarrollado 17 operaciones contra grupos terroristas islamistas con más de 150 detenciones en los últimos dos años.