14.2.05
Radiografía de un votante de izquierda
La igualdad, la defensa del medio ambiente, la solidaridad y la protección social han sido asumidas por la derecha como algo propio y natural . En la medida que el tiempo ha dado lugar a una perdida de sentido de todas las ideas de la izquierda, el uso de los sentimientos primarios resulta el recurso, casi único, que los partidos de esa parte del abanico político es capaz de enarbolar.
Sentimientos básicos en los que subyace la necesidad de hiperlegitimarse; llevando a los votantes de la izquierda a silogismos que, por simples, no dejan de ser absurdos.
Ante la renuncia de los valores morales tradicionales recurren sin rubor a una moralina de la izquierda, dictada por los gurús de la casa común; estos, sin mas ideario que la asunción como propios de valores universales, pretenden simbolizar la bondad mediante arquetipos, donde sus seguidores ven el espejo que les sirve como adormidera y encaje de su conciencia.
El estereotipo se basa en el siguiente silogismo: “Yo me considero un buen hombre, la izquierda defiende las cosas buenas, ser de izquierdas es cosa de hombres buenos, luego yo soy de izquierdas”. No les pidáis mas razonamientos; ese es el mecanismo engañoso que les hace ser dúctiles y manejables. Lo que les permite defender con ardor las consignas de sus lideres, aunque sean totalmente incoherentes con lo que decían ayer, incluso con lo que manifestaban pocos minutos antes.
Hemos asistido al abuso de la idea de la paz y el ecologismo como obuses de gran calibre en la estrategia de la izquierda para desbancar a la derecha, a la que considera un accesorio de la democracia, un mero accidente. Su hiperlegitimismo sólo tiene sentido mediante la negación de la legitimidad del contrario.
Vemos como la base socialista cambia de criterio en función de las estrategias temporales de su partido. Y como ejemplo: Asistimos asombrados a la negación, por los paisanos de izquierda, de la necesidad de agua en el Levante con este simple argumento: “¿Para que queremos el agua, para que se enriquezcan los especuladores? . Todo para justificar el miserable peaje del PSOE para mantenerse en el poder.
El discurso de las ideas pasa para ellos a un 2º plano; aceptan como única premisa la aparente bondad de una sonrisa sardónica, antes que la razón y las consecuencias de los actos.
Con todo su anticlericalismo, su comportamiento difiere bien poco de una manada de beatas de principios del siglo pasado; asidas a las sotanas del párroco, autoproclamaban su “santidad” en función de los relicarios que portaban, y en el ejercicio fariseo de la moralina con la que adornaban su conciencia; pasaban por el tamiz de la indecencia todo lo que no estuviera en su circulo de actuación y modos de comportamiento, satanizando conductas dentro de la reprobación mas escandalizada.
Los votantes socialista revolotean y siguen sin el mas sentido crítico los dictados de sus lideres (cura), sin importarles la amoldación interesada de su discurso a las circunstancias que más le interesa a su curia política. Se autoproclaman paradigmas de ejemplo de ciudadanía ( santidad), en función de los valores cuya propiedad exclusiva reclaman (relicarios), y califican como indecente cualquier acción, manifestación o comportamiento que vaya en contra de sus intereses políticos; deslegitimando (satanizando) cualquier conducta que provenga de la derecha( pecadora).
Este comportamiento simple es lo que lleva a militantes de izquierda a conductas como la de Pilar Majón: culpando a la derecha de la muerte de su hijo en atentado terrorista, por la intransigencia generadora de odio de otras civilizaciones. O la justificación de la miserable actuación de Carod en su entrevista con ETA, por que su condena perjudicaba al PSOE.
El liberalismo cree en la libertad como fin en si mismo y el sujeto activo de su ejercicio como destino final de todo comportamiento. El socialismo entiende al ciudadano como un medio para el ejercicio de sus fines, el uso de la libertad como un equipaje del que muchas veces se puede prescindir en el viaje a su construcción política. Este reducionismo les lleva a justificar toda actuación con un único fin: Mantenerse en el Poder.
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13.2.05
Zetrapacero
ZetraPacero
ZP está demostrando ser un profesional de la trapaza. Desde su discurso en el congreso sobre el plan Ibarretxe ha revelado ser algo mas que un engañabobos, un político mentiroso nadador entreaguas; ha evidenciado ser el gran inspirador de un artífice engañoso e ilícito con el que se perjudica y defrauda a España.
Que sus recursos eran limitados era algo que todos veíamos o intuíamos; la subordinación de toda acción a su interés personal y político, aunque sea en perjuicio a los intereses generales, lo ha hecho realidad día a día, desde que “prometió” en Abril como presidente de gobierno. De momento lleva todo el camino de convertirse en un gran perjuro.
No le importan las consecuencias de sus actos, sólo la rentabilidad electoral inmediata de los mismos, los réditos para mantener u obtener poder. La cesión sin límites a cambio del instante de una imagen propagandística ha sido la tónica de sus 10 meses de Desgobierno. Sonrisas y flashes mientras dilapida la herencia de un buen gobierno.
Con semejante currículo su alocución el día 1 de Febrero da miedo, mucho miedo. Menos mal que nos quedó el buen gusto de saber que Rajoy si sabe hablar y actuar como un hombre de Estado y dar replica a ese desafio. Las ofertas de acuerdo en la tribuna hacia un Ibarretxe, que vino a horadar la soberanía nacional en su sede mas sagrada, sacudieron como terremoto muchas conciencias, entre ellas las de algunos formadores de opinión seducidos hasta la fecha con el señuelo del talante.
ZetraPacero quiere la foto de la falsa pacificación de Euskadi, la del “acuerdo amable” entre el País Vasco y España que el lendakari intenta vendernos como un caldo con sabor a cicuta, ZP sólo quiere ponerle buen aroma. Desea ser el Chamberlain que agitando el “pacto” diga: yo os he traido la paz, aunque esta “paz” sólo sean cesiones a cambio del pastoreo de nuevos votos. Al final cómo el inglés sólo traerá mas sangre y lágrimas. Pero eso parece no importarle al personaje.
ZP está demostrando ser un profesional de la trapaza. Desde su discurso en el congreso sobre el plan Ibarretxe ha revelado ser algo mas que un engañabobos, un político mentiroso nadador entreaguas; ha evidenciado ser el gran inspirador de un artífice engañoso e ilícito con el que se perjudica y defrauda a España.
Que sus recursos eran limitados era algo que todos veíamos o intuíamos; la subordinación de toda acción a su interés personal y político, aunque sea en perjuicio a los intereses generales, lo ha hecho realidad día a día, desde que “prometió” en Abril como presidente de gobierno. De momento lleva todo el camino de convertirse en un gran perjuro.
No le importan las consecuencias de sus actos, sólo la rentabilidad electoral inmediata de los mismos, los réditos para mantener u obtener poder. La cesión sin límites a cambio del instante de una imagen propagandística ha sido la tónica de sus 10 meses de Desgobierno. Sonrisas y flashes mientras dilapida la herencia de un buen gobierno.
Con semejante currículo su alocución el día 1 de Febrero da miedo, mucho miedo. Menos mal que nos quedó el buen gusto de saber que Rajoy si sabe hablar y actuar como un hombre de Estado y dar replica a ese desafio. Las ofertas de acuerdo en la tribuna hacia un Ibarretxe, que vino a horadar la soberanía nacional en su sede mas sagrada, sacudieron como terremoto muchas conciencias, entre ellas las de algunos formadores de opinión seducidos hasta la fecha con el señuelo del talante.
ZetraPacero quiere la foto de la falsa pacificación de Euskadi, la del “acuerdo amable” entre el País Vasco y España que el lendakari intenta vendernos como un caldo con sabor a cicuta, ZP sólo quiere ponerle buen aroma. Desea ser el Chamberlain que agitando el “pacto” diga: yo os he traido la paz, aunque esta “paz” sólo sean cesiones a cambio del pastoreo de nuevos votos. Al final cómo el inglés sólo traerá mas sangre y lágrimas. Pero eso parece no importarle al personaje.
¿Por qué actúa así Zetrapacero?. Sin duda son sus propias carencias y el producto de su trayectoria política. Zapatero no tiene ni una sólida formación ni una extraordinaria capacidad intelectual. Toda su vida, sus estudios, su corta trayectoria universitaria, se los debe a sus afinidades políticas. No sabe hacer otra cosa. La trapacería es su profesión, el engaño continuado para mantener su puesto de culiparlante durante más década y media. Durante todo este tiempo le ha bastado para mantenerse decir que si a todo, tener en su boca la eterna y estúpida sonrisa y no ejercitar su mente nada mas que en el vacuo discurso sectario, inocuo hasta hoy. Lo que serían, de seguir asi, sólo daños menores se ha convertido en una posible tragedia por la jugada del destino que permitió auparle a un puesto que ni esperaba ni merecía. Lo peor es que muchos nos tememos que detrás de la jugada del destino estén las manos de unos tahures tramposos que, con premeditación y alevosía, se sacaron de los bolsillos mas pestilentes y oscuros una escalera de color, de corazones heridos y manchados de sangre.
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12.2.05
Algo huele a podrido
El oscurantismo es el hábitat de los malvados, de aquellos que, a pesar de sus laxas conciencias, necesitan el secreto para que sus actos execrables no les lleven donde merecen estar: en la picota.
Cuando se está jugando con algo tan esencial como la Unidad de España reunirse en las tinieblas sólo puede significar una cosa: Trampa. Ya no es una estafa de trilero: de promesas electorales vacuas , mentiras y acusaciones falsas al adversario, revestirse de sonrisa falsa mientras se aguanta el veneno propio detrás de los dientes. No es eso, no es el tocomocho del raterillo en campaña. Estamos ante un delito de lesa patria, ante la traición por una “revolución” encubierta que pretende destruir en dos años lo que ha costado 500 construir.
ZP no respeta ni la historia ni el sentimiento de la inmensa mayoría de los españoles. Sólo le interesa el resultado inmediato, la captura de votos sin importarle las consecuencias. Ya lo puede negar con su hipócrita sonrisa que no nos lo creemos. Convencerá a sus convencidos, a su masa acrítica capaz de seguirle hasta el despeñadero, pero no a los demás.
En esta semana ha salido a la luz del verdadero cariz de ZP. Sus reuniones secretas con Imaz y con Carod evidencian la perversión de sus intenciones.¿Por qué necesita encontrarse en secreto con los representantes de la “centrifugación” de España?¿Por qué ni Rubalcaba sabia si habían existido tales entrevistas? ¿Por qué mienten tanto que ninguno de los concentrados( ZP, Imaz, Carod) ni sus voceros (Tardá Mª Teresa Fdez. de la Vega) se ponen de acuerdo con lo que allí trataron?.
Cuando se está jugando con algo tan esencial como la Unidad de España reunirse en las tinieblas sólo puede significar una cosa: Trampa. Ya no es una estafa de trilero: de promesas electorales vacuas , mentiras y acusaciones falsas al adversario, revestirse de sonrisa falsa mientras se aguanta el veneno propio detrás de los dientes. No es eso, no es el tocomocho del raterillo en campaña. Estamos ante un delito de lesa patria, ante la traición por una “revolución” encubierta que pretende destruir en dos años lo que ha costado 500 construir.
ZP no respeta ni la historia ni el sentimiento de la inmensa mayoría de los españoles. Sólo le interesa el resultado inmediato, la captura de votos sin importarle las consecuencias. Ya lo puede negar con su hipócrita sonrisa que no nos lo creemos. Convencerá a sus convencidos, a su masa acrítica capaz de seguirle hasta el despeñadero, pero no a los demás.
En esta semana ha salido a la luz del verdadero cariz de ZP. Sus reuniones secretas con Imaz y con Carod evidencian la perversión de sus intenciones.¿Por qué necesita encontrarse en secreto con los representantes de la “centrifugación” de España?¿Por qué ni Rubalcaba sabia si habían existido tales entrevistas? ¿Por qué mienten tanto que ninguno de los concentrados( ZP, Imaz, Carod) ni sus voceros (Tardá Mª Teresa Fdez. de la Vega) se ponen de acuerdo con lo que allí trataron?.
Definitivamente algo huele a podrido en La Moncloa, el toque de aroma exótico lo podrían los visitantes, pero el ingrediente principal, sin duda, lo aporta el inquilino accidental con la pútrida conciencia que adereza sus oscuras intenciones. Si letal es el potaje que nos están preparando el chef monclovita y sus colegas catalanes y vascos, no menos grave es que se pretende diluir la sangre derramada por 1000 españoles como un ingrediente mas del vomitivo mejunje.
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